Historia y origen

La historia y el origen de la albahaca limón, o Ocimum × citriodorum, son tan fascinantes como su fragancia. Se cree que la albahaca, en general, se originó en la India y desde allí se difundió a otras regiones de Asia, llegando eventualmente al resto del mundo.

Durante milenios, la albahaca ha sido apreciada no solo por sus aplicaciones culinarias, sino también por sus propiedades medicinales. En Ayurveda, la medicina tradicional de la India, la albahaca ha jugado un rol significativo como hierba sanadora. Asimismo, se piensa que, en el antiguo Egipto, la albahaca era utilizada en el proceso de momificación por sus cualidades antibacterianas y conservantes.



A lo largo de la historia, la albahaca ha estado vinculada con diversas tradiciones y creencias culturales. Por ejemplo, en la Grecia antigua, era considerada un símbolo de desdén y luto, mientras que en Roma se le atribuían cualidades mágicas y sagradas, y su recolección se realizaba siguiendo rituales específicos.

La albahaca limón, en particular, es un híbrido entre la albahaca africana (Ocimum americanum) y la albahaca común (Ocimum basilicum). Se distingue de otras variedades por sus hojas más finas y su marcado aroma cítrico. Esta variedad se cultiva principalmente en el noreste de África y el sur de Asia, y es ampliamente utilizada en la gastronomía de países como Indonesia, Tailandia y Laos, debido a su pronunciado sabor a limón.