Cultivo de la albahaca

Estas preferencias de cultivo ayudan a asegurar que la albahaca crezca vigorosa y pueda ofrecer su máximo potencial aromático y culinario:

  • Temperatura: La albahaca prospera en climas cálidos y no tolera bien el frío. Las temperaturas ideales para su crecimiento están entre 20°C y 30°C.


  • Clima: Prefiere un clima cálido y húmedo, aunque algunas variedades como la albahaca limón son resistentes a temperaturas más bajas.
  • Luz solar: Necesita pleno sol para crecer adecuadamente, por lo que se recomienda plantarla en lugares donde reciba luz solar directa durante la mayor parte del día.
  • Suelo: El suelo debe ser fértil, con buena exposición solar y de textura ligera. Es importante que esté bien drenado para evitar el encharcamiento.
Zona de plantas aromáticas cbta 99.
  • Agua: La albahaca necesita un riego regular para mantener el suelo húmedo, pero sin llegar a encharcarlo. Es crucial evitar el exceso de agua para prevenir enfermedades y pudrición de las raíces.
  • Para fomentar un crecimiento saludable y frondoso, es recomendable podar las puntas de los tallos cuando la planta alcanza unos 15 cm de altura. Además, el uso de mantillo plástico u orgánico alrededor de las plantas puede ayudar a calentar el suelo, conservar la humedad y evitar las malas hierbas.
  • Uso de lombricomposta: También conocida como lombricompost, vermicompostaje o humus de estiércol de lombriz, es un método de compostaje que utiliza lombrices y microorganismos para transformar la materia orgánica en un abono muy similar al humus o compost. Este proceso se lleva a cabo generalmente con residuos de cosechas, estiércoles de herbívoros y otros materiales orgánicos. Usaremos este abono para criar nuestra planta.